sábado, 21 de febrero de 2015

ALGO DE HISTORIA SOBRE LAS "GUARRAS" Y SINVERGÜENZAS QUE RECLAMARON EL ABORTO EN EUROPA



Derecho al aborto: el Manifiesto de las 343 salopes
Personalidades francesas reclamaron la libertad reproductiva en 1971
En pleno debate sobre el aborto, tanto en España como en varios países latinoamericanos, es interesante echar la vista atrás y recordar una de las protestas pacíficas más destacadas en defensa de los derechos reproductivos.

Publicado el 5 de abril de 1971 en la revista francesa 'Le Nouvel Observateur', el llamado 'Manifiesto de las 343' fue redactado por Simone de Beauvoir y firmado por 343 mujeres de la política, la cultura y distintas áreas de la sociedad francesa como la escritora Marguerite Duras, la abogada Gisèle Halimi o las cineastas Françoise Sagan, Jeanne Moreau y Agnes Vardà.

La iniciativa fue idea de la periodista francesa Jeanne Moreau  y se conoce también como 'Manifiesto de las 343 salopes (que se traduciría al español como guarras)', sobrenombre que le puso el dibujante de caricaturas Cabu en el semanario satírico Charlie Hebdo.

El feminismo tras 'mayo del 68'
En aquel momento, el aborto era aún un delito en Francia, con incluso penas de prisión, y muchas mujeres viajaban a Reino Unido o Suiza para interrumpir su embarazo en clínicas clandestinas. El Movimiento de Liberación Femenina (Mouvement de Libération des Femmes, MLF) había hermanado a estadounidenses y francesas tras las revueltas de Mayo del 68 y los derechos reproductivos se convirtieron en uno de los asuntos fundamentales de sus reivindicaciones.

En ese caldo de cultivo, el feminismo francés se hizo fuerte y el 26 agosto de 1970 tuvo lugar una de sus acciones más populares: doce integrantes del MLF fueron arrestadas tras depositar una corona en homenaje a "la mujer del soldado desconocido" en el Arco del Triunfo de París. En la pancarta podía leerse:
"Hay alguien más desconocido que el soldado desconocido: su esposa". ("Il y a plus inconnu que le soldat inconnu, sa femme".)

Pronto, las manifestaciones y 'performance' para alertar sobre los patrones de belleza, la violencia machista o la igualdad en el trabajo se intensificaron y, en este contexto, se impulsó la publicación de un escrito para mostrar a la sociedad la realidad del aborto. En ese momento, dos terceras partes de los franceses y francesas estaban a favor de que se despenalizase, según Le Nouvel Observateur.

Repercusión internacional
En el Manifiesto de las 343, las firmantes se 'autoinculpaban' de haber abortado, aún a riesgo de ser encarceladas con ello. Mediante esta 'confesión pública' reclamaban el aborto libre y gratuito así como el acceso universal a los métodos anticonceptivos. Este es el inicio del texto:
"Un millón de mujeres aborta cada año en Francia./ Lo hacen en condiciones peligrosas debido a la clandestinidad a las que se las condena, mientras que esta operación, realizada bajo supervisión médica, es muy sencilla./ Se sume en el silencio a estos millones de mujeres. / Declaro que soy una de ellas. Declaro que he abortado. / Del mismo modo que reclamamos el libre acceso a los anticonceptivos, exigimos aborto libre".

Este acto de 'desobediencia civil' provocó un encendido debate, con el diario Le Monde en contra, y tuvo una enorme repercusión internacional en Europa, Estados Unidos o Japón. Así, la feminista alemana Alice Schwarzer puso en marcha una iniciativa similar encabezada por la actriz Romy Schneider en el semanario Stern y, dos años más parte, más de 300 médicos franceses realizaron otra recogida de firmas. Esta iniciativa y el juicio Bobigny (a una menor, por haber abortado en un caso de violación) contribuyó a que en 1975 comenzaran las reformas en el Elíseo para permitir a las mujeres decidir sobre su maternidad, en un principio durante las primeras diez semanas del embarazo. 

¿Y ahora?
Desde 2001, la ley de plazos francesa permite abortar hasta la semana 14 en cualquier supuesto, todo un avance para las mujeres francesas, que vieron reconocido su derecho al voto en 1944; el derecho a trabajar libremente en 1965 y el derecho a la anticoncepción en 1969, en una época en la que la 'píldora' se convirtió en un símbolo de la libertad sexual.


No hay comentarios:

Publicar un comentario